ESPACIOS DE ARTE, FEBRERO, ARQUITECTURAS DEL SONIDO - OLIVER MARTÍNEZ

ARQUITECTURAS DEL SONIDO - OLIVER MARTÍNEZ
Galería Corredor Tomás Chávez Morado
Del 12 de febrero al 11 de marzo 2020
Inauguración miércoles 12 de febrero 2020



Arquitecturas del sonido de Oliver Martínez muestra una clara evolución y un dialogo constante entre el dibujo, la pintura, la arquitectura y la escultura.  Una colección formada por dieciocho obras que fueron realizadas durante los últimos dos años en San Miguel de Allende, en donde se encuentra actualmente su estudio.

Su técnica pictórica consiste en el uso de empastes gruesos que crean tejidos llenos de energía. Cada obra está formada por capas sobrepuestas que van generando poco a poco la composición de la pintura. Dentro de las texturas que se integran en el espacio aparece el dibujo gestual como una estructuración espacial semejante a pentagramas que fluyen en cada fragmento del lienzo.

En cada obra logra reflejarse la intensidad de cada trazo a partir del movimiento de los colores que a su vez representan sonidos o energías diferentes. De esta forma es como puede entenderse la dualidad del artista en cada uno de sus cuadros. Por un lado se encuentra el sentido espiritual y etéreo del color que se funde sutilmente y por otro, el sentido corporal por medio de tensiones que se estallan con cada textura rota.

El uso simultáneo de los planos visuales horizontal y vertical, provocan un efecto tridimensional en donde los colores parecen flotar sobre el lienzo y fugarse en un horizonte lineal.

Podría decirse que el artista construye la piel sobre la cual crea sensaciones, todas con energías opuestas.  De esta manera se invita al espectador a un proceso sinestésico en el cual se puede tocar o escuchar con la vista.

Es evidente la relación directa de las “atmósferas sonoras” con construcciones arquitectónicas, abstracciones de paisajes urbanos o mapas de recuerdos que crea el artista y donde logra disolver sus emociones llenas de fragilidad y de carácter al mismo tiempo.
De manera irremediable se crea esa invitación permanente para recorrer y vivir cada pintura desde dos enfoques: el contemplativo que se logra al observar el lienzo a distancia y el vivencial en el cual puede recorrerse de manera fragmentada cada gesto. 
Ambos medios de observación son válidos para el artista, que se muestra versátil en cada obra al añadir elementos que renuevan su lenguaje constantemente. 


Ver las arquitecturas rotas e infinitas que se construyen con cada pieza, ya sea entendiéndolas desde el rigor y la perfección o la liberación de energías espiritual y corporal, se vuelve un medio directo para lograr entender al artista.
Maquetas llenas de sonidos y construcción de pentagramas son la constante para visualizar y escuchar lo que ocurre en la mente de su creador.

Comentarios